Hombres en lugares públicos

Vera Ricerca
El juego del paquete
3 min readMar 29, 2017
Imagen de autoría propia

Hasta al supermercado voy con la esperanza de conocer a alguien.

Camino por las góndolas y recorro cada rincón como si de verdad estuviera buscando cloro para pileta, un matafuegos para auto o embutidos alemanes. El objetivo es detectar a los hombres que estén comprando solos.

Pero la tarea no termina ahí. A cada uno lo escaneo buscando indicios de soltería o sus derivados.

Si compra siguiendo una listita deduzco que sigue indicaciones de una mujer: descartado!

Si tiene comida chatarra en el changuito: posible soltero!

Si me gusta lo sigo un poco mientras fantaseo sobre la continuación de la escena: mientras camino frente a la heladera de carne vacuna, su luz cálida (la que ponen especialmente para que la carne no se vea más azul de lo que está) se refleja en mi cara y provoca que mi cutis se vea sedoso y rozagante. Me siento sexy y hasta el repositor de lácteos me guiña el ojo afirmando que este es mi momento. Entonces llega EL soltero codiciado del super y haciendo un gesto con la mano para llamar mi atención pregunta:

— Sabés dónde puede estar el Campari?

— Sí, justo acabo de agarrar una botella, dos góndolas a la derecha.

— Qué lástima que ya agarraste porque te iba a invitar a tomar uno juntos.

Risas de ambos y cita en curso.

Volvamos a la realidad: el 65 % de las personas que van al super son mujeres (?), del 35% masculino restante: 15% son homosexuales y del 20% que queda, en el 10% de los casos aparece enseguida ella -otra que no soy yo- al grito de “ya encontré los hisopos y el detergente, amor”.

Yegua.

Nunca conocí a un hombre en un lugar público. Ni en un bar, ni en el colectivo, ni en ningún lado. Siempre por presentaciones o en alguna actividad concreta que estuviera haciendo.

Mi amiga Laura espera el colectivo y alguien le pide el teléfono. Camina hacia su trabajo y otro tipo la frena para invitarla a tomar un café. De hecho, casi todos los hombres de su vida los conoció en circunstancias similares.

Es muy loco como, lo que es cotidiano para uno, para otro puede ser tan ajeno.

No me puedo dormir pensando en este tema (Ah-bue-a-vos-sí-que-te-quitan-el-sueño-cuestiones-fundamentales-Vera!). Le escribo a mi hermano sabiendo que en Madrid, donde vive, son las 6 am y no me va a responder, pero necesito hacer catarsis de alguna manera: Javi, porqué nunca conozco a nadie en lugares públicos?

Pasan 15 minutos y me contesta:

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Vera Ricerca
El juego del paquete

Soy feliz a pesar de saber que en el mundo hay reptiles, medias sucias y mermelada cítrica. Escribo en el blog El Juego del Paquete. elblogdevera@gmail.com