ILA 19, Medellín: una ciudad y un encuentro transformador
Una ciudad rediseñada
Este año el encuentro entre los diseñadores de interacción ocurrió en Medellín, Colombia, una ciudad que, en la década de los 80, era considerada la segunda urbe más peligrosa del mundo. Como nos relató el guía del walking tour que tomamos, “la ciudad donde se mataba a 18 personas por día”, donde las armas y el narcotráfico gobernaban las calles, donde las personas no estaban acostumbradas a reunirse, por miedo y desconfianza, ni a compartir espacios ni actividades. A donde nadie se involucraba con nadie, inclusive el mismo gobierno.
Sin embargo Medellín y sus amistosos paisas decidieron modificar su futuro. Y se embarcaron en el viaje de transformarse.
Arrancaron por acciones sencillas y para nosotros habituales como crear una plaza pública: la Plaza de los Pies Descalzos, un espacio pensado para que los paisas comiencen a habitar junto a sus familias espacios comunes. Y siguieron con otras obras gigantes, como la transformación del transporte, que requirió no sólo de su puesta en marcha, sino además de modificar la cultura de la sociedad. Y así diseñaron por ejemplo la “cultura metro” que trasciende el transporte y se ve reflejada en cualquier rincón de la ciudad.
Esta transformación, de hecho, nos permitió a los diseñadores concretar el encuentro anual de la comunidad, justamente convocándonos a conversar sobre convergencia y sobre el poder estratégico del diseño, en una ciudad que está saliendo adelante precisamente con la ayuda de un proceso de rediseño. Es por eso que Medellín no pasa desapercibida, y no fue una ciudad más. Estar ahí me hizo bien a mi, por un lado, que pude observar y entender que podemos cambiar las cosas; y por otro lado les hizo bien a ellos, los paisas, orgullosos de que los visitemos.
Incluso el centro de convenciones donde ocurrió el evento es parte de las obras de la transformación: la Plaza Mayor, construida para invitar al mundo a reunirse en actividades y charlas enmarcadas en la nueva ciudad.
Ahí estuve hablando de inclusión financiera, en una ciudad donde la inclusión y el desarrollo de la libertad y el respeto se respiran en todo momento.
3 charlas, 3 oportunidades
En Flux IT nos gusta mostrar y contar lo que hacemos; ILA 19 nos dio la oportunidad de compartir 3 casos en los que nos encantó trabajar (fuimos la cara visible de un gran equipo de trabajo interdisciplinario). Proyectos innovadores, transformadores y sociales, que ponen a las personas en el centro de su razón de ser:
- Nico habló sobre todo el trabajo que hay detrás de la construcción de un chatbot dirigido a una comunidad interna, nuestro bot corporativo caracterizado por tener una personalidad muy especial;
- Pau compartió la experiencia de desarrollar soluciones IoT para terminales portuarias poniendo foco en la experiencia de todos los actores del ecosistema;
- Y yo tuve la oportunidad de hablar de inclusión financiera, con una solución dirigida a mejorar las finanzas personales de las empleadas domésticas de la Argentina.
Tres proyectos que nos encantan y que nos sentimos muy cómodos de compartir con la comunidad latinoamericana, que nos hizo ver que nuestras inquietudes se replican en el resto del Continente.
Un encuentro introspectivo
Este año sentí el evento de una manera diferente. En ediciones anteriores volvía con mayores revelaciones en el sentido del futuro de nuestra profesión. Esta vez sentí que a los diseñadores nos tocó trabajar en el autoconocimiento, en un acto introspectivo y reflexivo. En estos últimos años, por suerte, los diseñadores de interacción crecimos y también crecieron los equipos; y fue este el momento de mirar un poco hacia adentro y revisarnos: nuestros procesos, los roles que conformamos los equipos, nuestras formas de trabajar, de crecer e incluso de proyectarnos.
Algunas preguntas y reflexiones de todo lo que nos regaló ILA 19:
> ¿Qué debo hacer yo, diseñador, para ser mejor? ¿Qué debo ser?
Donna Spencer y Jason Mesut nos llevaron a repensar las formas de presentar nuestros trabajos, de obtener feedback y de posicionarnos frente al resto. ¿Educamos a nuestros clientes para que nos den buen feedback? ¿Dejamos que las cosas nos sorprendan o diseñamos nuestros encuentros, proyectos, profesión? ¿Cómo nos ven los demás? ¿En qué somos buenos?
> ¿Cómo estamos encarando nuestros proyectos y nuestra profesión?
Josh Seiden mostró qué importante es identificar el comportamiento a cambiar en las personas, para lograr un objetivo. Y en este camino emerge nuestra ética profesional. ¿Qué comportamientos estamos generando con nuestros diseños?
Por su parte, Cheryl Platz nos propuso pensar en diseñar también desde el vaso “medio vacío”: pensar en los escenarios más optimistas, pero también en los más pesimistas a la hora de encarar nuestros desafíos.
Y en su charla magistral Louis Rosenfeld fue más allá, planteando cómo muchas veces somos prisioneros de palabras y conceptos que nosotros mismos generamos y que nos terminan jugando en contra:
“Como profesión, dejemos de perder el tiempo discutiendo sobre las cárceles del momento, especialmente sobre definiciones y metáforas. Esa es una energía desperdiciada que, en su lugar, podría invertirse en resolver los enormes problemas que el planeta necesita que nosotros, como diseñadores, abordemos en este momento.”
> ¿Cómo estamos haciendo crecer a nuestros equipos?
También estuvo presente el tema del reclutamiento y el liderazgo. Nick Finck nos invitó a reflexionar sobre las formas de hacer reclutamiento, las exigencias y la falta de contemplación para las personas que están queriendo insertarse en el campo: se le solicitan los mismo años de experiencia promedio a juniors como a seniors. ¿De qué nos estamos perdiendo si sólo medimos la calidad de una persona por sus años de experiencia? ¿Cómo vamos a hacer crecer a nuestros equipos si no formamos gente? ¿Cómo hacemos para sumar juniors y seguir adelante en nuestro día a día?
> ¿Qué rol ocupamos hoy las mujeres UX?
Por último rescato que, de forma transversal a todo el evento, estuvo en la mesa de debate el rol de las mujeres y el diseño, teniendo como mayor exponente a Maritza Guaderrama, quien además reivindicó la calidad del trabajo de los diseñadores latinoamericanos.
Múltiples ideas y conceptos reunidos en 3 días con colegas de toda Latinoamérica en una ciudad que nos invitó a pensarnos y transformarnos; una ciudad que nos demuestra que, cuando nos lo proponemos, el cambio es posible.
Quiero agradecer al equipo de IxDA Medellín que organizó este evento y nos permitió ser parte de la aventura.
La próxima ciudad anfitriona es Costa Rica, ¿Qué nos traerá ILA 20'?
