Laboratoria en Brasil: el emprendimiento social que conquista fronteras.
Brasil, este blog es para ti. Aquí te contamos algunas de las muchas razones por las que nos ilusiona llegar a ti.
Laboratoria nació hace poco más de tres años. Desde entonces, el sueño que teníamos de transformar la vida de mujeres latinoamericanas y brindar talento de punta al sector digital, se fue haciendo realidad. Con un modelo educativo innovador, hemos graduado a más de 580 mujeres, quienes hoy trabajan como web developers o UX Designers en equipos de tecnología en más de 200 empresas, dejando su huella y cambiando poco a poco el rostro de la industria tech.
Estos logros han sido, principalmente, resultado de una dedicación incansable de nuestro equipo y de nuestras alumnas. La búsqueda por la excelencia en todo lo que hacemos y el impulso de nuestras alumnas por superarse, son lo que nos llevan a ir más allá. Pero también ha sido clave el saber encontrar un equilibrio sano entre arriesgar con incertidumbre por un lado, e iterar y consolidar aprendizajes antes de tomar el próximo paso, por otro.
La decisión de cuándo y cómo crecer nos lleva siempre a reflexionar acerca de ese punto de equilibrio, que ante tremenda incertidumbre, puede no ser fácil de encontrar. Pero en nuestra corta y emocionante historia, hemos sido fieles en tratar de identificar el potencial en los retos, la oportunidad en las crisis, y el momento en que ese salto nos emociona más de lo que nos frena.
Hoy, me da mucho orgullo anunciar nuestro más nuevo reto. Uno que nos tiene emocionados, y pensando en grande. En el marco del Día Internacional de la Mujer en la Ciencia, anunciamos la llegada de Laboratoria a Brasil. En alianza con la emprendedora Regina Acher quien liderará la iniciativa a nivel local, Laboratoria empezará un piloto con una meta de seleccionar y formar a 50 mujeres talentosas como front-end developers en São Paulo y conectarlas con la inmensa demanda de la industria tech. En la economía más grande de Latinoamérica, queremos contribuir con un crecimiento basado en el potencial de las mujeres brasileñas, aportando talento y mayor diversidad de género a la industria.
De multinacional a multilingüe
Laboratoria nació en Lima, Perú en el 2015 y rápidamente creció a México y a Chile. Con esa primera expansión hace tres años, nos convertimos en una pequeña multinacional latinoamericana, con gran diversidad y riqueza cultural. En estos tres países, hoy somos casi 80 Laboratorians representados por 12 nacionalidades diferentes. Traemos perspectivas y experiencias diferentes a la mesa pero estamos todos unidos por un vínculo común: el español.
Hablar el mismo idioma achica distancias, optimiza procesos, y disimula las diferencias. Expandir a Brasil, por otro lado, implica convertirnos en una organización multilingüe que debe superar las barreras de idioma y cultura. Significa, entre muchos cambios, desarrollar más de 1,000 horas de contenido de formación en programación en un nuevo idioma, establecer nuevos procesos de comunicación interna — incluyendo el portugués como idioma oficial, acostumbrándonos al portuñol y aprofundando el uso del inglés — y adaptarnos a una nueva cultura. El reto no es menor, y de hecho, son pocas las startups que se han aventurado a cruzar de Brasil al resto de la región, o vice versa. El desafío nos mueve y nos mantiene enfocados, trabajando de manera lean, aprendiendo de los errores, y ganando mayor experiencia.
Mercado tech de gran potencial
Brasil es la economía más grande de América Latina y la séptima más grande del mundo. Y São Paulo se posiciona como el principal hub de esta actividad económica, representando más del 30% del PIB del país.
Entre las industrias que más rápido crecen está la digital, y la inversión en startups de tecnología en Brasil ha crecido de la mano. Hace pocas semanas, 99, una aplicación de transporte de taxis se convirtió en la primera unicornio brasileña, valuada en más de US$1 billón, al ser comprada por Didi Chuxing de China, la principal competencia de Uber a nivel global. El país es además, el segundo mercado más grande a nivel global (solo pierde ante Estados Unidos) en número de usuarios en Facebook, Twitter y Youtube (Tech Crunch 2017).
Toda esta inversión por grandes empresas extranjeras de tecnología, y un ecosistema de emprendimiento local sano, con potencial de aún mayor crecimiento, presenta una necesidad enorme de talento. 43% de las empresas reportan tender dificultades de encontrar profesionales calificados (Manpower 2016), y se estima que para el 2020, Brasil tendrá un déficit de más de 400 mil programadores para cubrir la demanda (Softex). En un mundo cada vez más digital, algunas empresas se están viendo obligadas a reclutar talento fuera del país para cubrir sus necesidades.
Brasil, con tanta diversidad y potencial, necesita invertir en el talento de los jóvenes para el futuro del país. En Laboratoria, queremos identificar ese talento, formarlo y así convertirnos en una fuente de talento tech de punta para la industria tech brasileña.
Educación y mujeres en tecnología
Brasil tiene una población de más de 40 millones de jóvenes, de los cuales un tercio se encuentran desempleados o sin estudios (IBGE). Entre ellos, hay casi 10 millones de mujeres brillantes, con potencial y ganas de salir adelante, pero sin acceso a una educación superior de calidad.
Las universidades públicas de alta calidad en Brasil lamentablemente siguen siendo desproporcionadamente ocupadas por la clase alta. Las becas para estudiar en universidades privadas en Brasil han aumentado el acceso a educación superior para jóvenes de escasos recursos, pero siguen siendo limitadas. Y aun así hay dudas sobre la calidad de algunas de esas instituciones.
Con respecto a la fuerza laboral, el desempleo entre las mujeres es 30% más alto que entre los hombres, y una vez empleadas, las mujeres brasileñas ganan 24% menos que los hombres.
En un país donde la industria tech no solo necesita más talento, pero requiere mayor diversidad de género también, se presenta una oportunidad enorme para cerrar esta brecha.
Con Laboratoria en Brasil, queremos formar una nueva generación de jóvenes mujeres que pueden transformar sus vidas al mismo tiempo que puedan contribuir con el crecimiento de la industria con su talento y su diversidad.
Pensando en estos últimos tres años de Laboratoria, recuerdo el sentimiento que tuve a principios de 2015. Estábamos empezando Laboratoria en México, sentía un amor profundo por el país, y enormes ganas de verlo crecer de manera más justa, con igualdad de oportunidades, y respetando los derechos de las mujeres. Siendo brasileña, soñaba con quizás un día poder contribuir de la misma manera en mi propio país. Hoy, celebro esa oportunidad con la certeza de que esta expansión va representar un capítulo importantísimo en la historia de Laboratoria, y gracias a eso, seremos aún más grandes, y aún más latinoamericanos.
