Ya no nos reímos como antes
Hace tiempo que no me río de verdad. Me refiero a carcajada limpia, a desternillarse de risa. Reírse y ya está, sin análisis mediante. La risa más pura, la que nace de las entrañas, de lo más profundo. Una risa casi violenta, que duele, más de homo erectus que de homo sapiens. La…