‘Vou Ficar Neste Quadrado’, entre la análoga tradición y la electrónica
El 15 de marzo de 2024 la artista portuguesa Ana Lua Caiano estrenó su primer álbum de estudio, después de dos EPs y 10 sencillos.
Al escuchar el vaivén constante entre tambores y beats con la melodía otorgada por Ana Lua Caiano, es imposible no recordar a El Mal Querer (2018) de Rosalía, detalle complicado de resaltar al ser Portugal el espacio en que esta artista musical y audiovisual crea. El 15 de marzo de 2024Lua Caiano lanzó Vou Ficar Neste Quadrado, su primer álbum de estudio donde muestra la exitosa combinación de música tradicional portuguesa y electrónica.
A sus 23 años, la joven portuguesa se destaca como una bisagra en la música popular ibérica. Del fado a la electrónica, la Lua Caiano oscila entre la tradición y la innovación, entre lo analógico y lo digital. En su sonido se fusionan los sintetizadores, beat-machines y tambores, todos tocados por ella, quien se presenta como una mujer orquesta.
Desde Em Direção Ao Sul, que da un pequeño mordisco al sonido de Ana Lua Caiano, te introduces entre beats, sonidos de ambiente y el mascullar de su voz. ¿La hibridación es una moda o un el final único de todo género? Lua Caiano muestra que en la fusión está la tradición y el único camino es el baile entre lo viejo y lo nuevo.
En una entrevista en Naiz, medio de comunicación de País Vasco, la artista portuguesa admite que su vida ha sido la música, iniciando con el piano clásico y el jazz. Sin embargo, destaca a cantautores tradicionales de Portugal como Zeca Afonso, Sérgio Godinho o Fausto Bordalo Dias, con los que el fado como género entra en la vida cotidiana de Ana Lua Caiano, como lo hizo Mercedes Sosa en un hogar argentino o Joan Manuel Serrat en uno catalán.
La tradición no es el único pilar para Lua Caiano. En la misma entrevista acepta la influencia de Bjork y Portishead. La melancolía de la canción tradicional protesta portuguesa se encuentra con la oscuridad del rock alternativo y experimental de los 90. Todo batido en la cabeza de Ana Lua Caiano.
Por ejemplo, en Deixem O Morto Morrer, octava canción del álbum y la que tiene más reproducciones, muestra la sinergia entre los vientos y la percusión analógica con beats colocados en bucle. La voz de Ana Lua Caiano pareciera rezar, dando una energía del encuentro entre una misa y un rave.
En el mismo video de la canción, Lua Caiano aparece con un vestido tradicional en escenarios rurales. Entre mujeres que parecen estar atrapadas en el medioevo, pero a la vez a inicios del siglo XX, convirtiéndose en un video atemporal. La pieza audiovisual, con una estética que alude a la raíz de Portugal, no te deja no recordar a El Mal Querer de Rosalía.
Vou Ficar Neste Quadrado, al igual que el álbum de la artista barcelonesa, es una juego de tiempos y estéticas que refresca la tradición. Y al igual que España, Portugal estuvo invadido por árabes durante 800 años y compartiendo un gen gitano. Sin embargo, el fado, a diferencia del flamenco, no nace de los gitanos, pero sí de la migración, creyéndose que pudo llegar de Brasil cuando fue colonia. Ahí se encuentra un ambiente con detalles similares que ayudan ver la hermandad entre los dos países de la península ibérica.
Ana Lua Caiano encapsula la historia de su país y referencias en 11 canciones. Un glitch en una guitarra y tambor, convirtiendo el rezo en un bucle. La artista portuguesa desafía la tradición para reinventarla y gritar aquí me quedo.