Realidad, what?
Por Laura Morales Díez Diseñadora de producto en Secuoyas
Últimamente hay muchos términos que se refieren a todas estas tecnologías que cada vez van llegando con más fuerza. Como me encanta, y siempre estoy hablando del tema, mucha gente me pregunta sobre ellos. Voy a intentar explicar sus diferencias de manera sencilla:
Realidad virtual (virtual reality o VR): Es 100% inmersiva. Mediante unas gafas o casco y técnicas estereoscópicas, nos introducimos totalmente en un mundo que sustituye al real (puede ser creado en 3D o grabado mediante cámaras 360º).
Realidad aumentada (augmented reality o AR): Se trata de proyectar elementos virtuales que se superponen en nuestro entorno real para enriquecerlo. Existen dos tipos: Espejo mágico (un ejemplo serían los filtros que utiliza Snapchat donde veo mi imagen como si se tratara de un espejo, pero mi imagen modificada) o lente mágica, donde a través de un dispositivo, ya sean grandes pantallas, smartphone, tablet o incluso unas gafas (Head-Mounted Display), veo mi entorno con objetos virtuales agregados. Un ejemplo sería el famoso juego de Pokemon Go para smartphone.
Realidad mixta (Mixed reality o MR): Es la combinación entre las dos anteriores, realidad aumentada y realidad virtual. Los elementos del mundo real y virtual conviven pudiendo provocar oclusión de objetos virtuales por detrás de objetos físicos, como pasa por ejemplo con las Magic Leap.
Y todo este ecosistema que incluye realidad virtual, aumentada y mixta se denomina Realidad extendida (Extended reality o XR).
Pensamos que esto del 3D o la intención de engañar a nuestros ojos y crear mundos realistas es cosa de hace unos pocos años. ¿Seguro? Aquí una pequeña muestra de que tal vez nos equivocamos…
Todos estos aparatos intentaban engañar a nuestra retina para que sintiéramos esa sensación de realidad, de objeto tridimensional delante de nosotros. Unos eran más sencillos y otros más complejos, pero su finalidad era parecida.
Estoy segura que en estos años casi todo el mundo ha probado algún dispositivo de realidad virtual, ya sea en un simulador en un parque de videojuegos o unas sencillas Cardboard (gafas de cartón de bajo coste que sacó Google hace unos años para disfrutar de la realidad virtual).
Está claro, la realidad virtual ha llegado a nosotros muchas veces a lo largo del tiempo, pero ahora, gracias a los nuevos dispositivos, ha llegado para quedarse.
Desde las Oculus DK1 el salto en calidad es exponencial y lo que viene es imparable. Si has probado cualquiera de estos dispositivos anteriores dale una nueva oportunidad a la realidad virtual y prueba uno de la nueva generación. Uno con 6DOF preferiblemente, 6 grados de libertad donde incluso puedes moverte y andar por el entorno virtual. Por ejemplo las Oculus Rift, HTC Vive o incluso el nuevo lanzamiento de Oculus, las Oculus Quest que por supuesto ya tenemos en el estudio. :)
Por fin los mundos virtuales son casi casi reales, apenas hay fallos de software que provoquen mareos (ya hablaremos de los fallos de diseño en algunas experiencias, que esa es otra historia) y podemos decir que de verdad esta tecnología es totalmente inmersiva. Al rato te olvidas de que tienes puestas unas gafas y estás viviendo en otro mundo… Parece increíble pero, por suerte, ya estamos viviendo ese momento.
Sobre la realidad aumentada las posibilidades son enormes. Desde educación, entretenimientos, salud, industria… se abre un mundo de capacitación rápida a cualquier perfil.
Y ya si hablamos de la realidad mixta es una locura. Puedes ver tu mundo real, al que añades objetos virtuales. Estos objetos además pueden interactuar con tus paredes, tu suelo… Además de todas las posibilidades que tiene a nivel entretenimiento, al igual que la realidad aumentada, las que se abren en productividad, salud, consumo, industria… son enormes.
Descubramos estos nuevos mundos y démosle una nueva oportunidad a vivir en primera persona una de estas experiencias, porque de verdad que no deja a nadie indiferente.
Ilustraciones: Laura Morales
