De actor protagonista a creador de tu propio mundo
Al darte cuenta de la inmensidad del mundo de la programación y aceptarlo tal y como es, sentirás la necesidad de empezar a ser el protagonista de toda esta historia. Te informarás sobre que tecnologías demandan más las empresas, o un colega de profesión te comentará que pruebes no se que framework porque hace unas aplicaciones «nivel dios» con tan solo cuatro lineas de código.
En definitiva, tendrás tantas ganas de entrar en el Hall of Fame de los desarrolladores que tomarás la decisión de hacerte experto en C++, Java, Python y otros muchos más lenguajes.
«Total en el curso que hice, me dijeron: ¡No te preocupes chaval! ¡Si sabes programar, podrás aprender cualquier lenguaje!».
¡Ains! Mi querido padawan, como se nota que eres un cachorrito lleno de ambición pero carente de experiencia.
Llegados a este punto no todo es malo, y además, estás de enhorabuena. Ya que puedes haber entrado a este post a tiempo. De esta manera habrás ahorrado mucho debate interior, disgustos y te habrás evitado muchísima frustración developeriana.
En mi opinión, basada en varios años de experiencia, la clave para superar este tipo de crisis de identidad esta en el enfoque:
Y es que por qué enfocarte en ser el protagonista de la historia, dejándote dirigir por los ya comentados agentes externos, cuando tú mismo puedes ser el creador de tu propio mundo. Para que me entendáis… ¿Por qué enfocarse en ser Anakin Skywalker, Harry Potter, Frodo o Amaia Salazar… Si puedes ser George Lucas, J. K. Rowling, Tolkien o Dolores Redondo?
Para que empieces a disfrutar de la programación debes aprender a hacer tu propia literatura, pensar en cómo crear tus propios libros, a diseñar tus propios mapas.
Como último consejo, pero no por ello menos importante, te recomiendo que hagas el ejercicio de dejar todo lo que estés haciendo y te tomes un momento para averiguar qué es lo que quieres hacer, cual es la temática del libro que quieres escribir. Cambia el enfoque. Deja ya de arrastrarte por el río…¡Móntate en la barca y disfruta haciendo rafting! Tenía más metáforas pero creo que ya lo entiendes… (Además tampoco quiero que me metas en el saco de los supercoachs.)
Resumiendo, tómate tu tiempo para buscar tu enfoque porque es muy importante de verdad (¡más que programar!) y no te desanimes si te cuesta encontrarlo, todos y cada uno de los programadores tenemos algo que contar, algun protagonista que crear, solo que cuesta meterlos en un libro, ¿no crees?