Design Thinking: Rico, rico y con fundamento
Así es como un conocido chef de la televisión con el que aprendí a cocinar ha descrito siempre sus mejores platos. Creo que no hay mejor manera de sintetizar en pocas palabras el proceso que hemos vivido a través de la metodología del Árbol Estratégico para co-diseñar el futuro de FoodOp.
Desde Morelia, 8 grandes profesionales han unido fuerzas para potenciar con su amplia experiencia el crecimiento y la expansión de negocios de la industria restaurantera de México. Juntos, teníamos un claro objetivo: dar fundamento al proyecto definiendo su propia identidad como colectivo y modelando los pasos claves para el crecimiento del negocio en 2017.
Durante 4 sesiones, se sentaron a la mesa sin ideas preconcebidas, con apetito de innovación y confiando en el chef o facilitador, y sin duda es la mejor manera de degustar un proceso de Design Thinking para sacarle ‘buen provecho’.
Botana
Para abrir boca, y en conjunto con el equipo de Bluebox, iniciamos con una sesión conjunta que permitiera a todos los participantes entender el modelo visual del Árbol Estratégico y llevarse una importante tarea a casa: explorar e identificar su archivo profundo.
25 participantes, 1 facilitador y una amplia sala perfectamente ideada para dejar que fluya la imaginación: pinta en las paredes, túmbate en el suelo o salta en trampolín. Todo listo para comenzar a agitar las neuronas.
Los entrantes
Compartir lo que somos con nuestro equipo es integrador, acerca a las personas y define al colectivo. Así comienza siempre el proceso, dándose a conocer desde lo más profundo, descubriendo todo aquello que nos conecta.
Emprendemos como somos y sólo conociendo nuestras motivaciones, los acontecimientos, personas, convicciones (archivo profundo) que han dirigido nuestros pasos hacia nuestro proyecto es posible dar sentido a lo que hacemos.
Como facilitador canalizas ideas, energías, y hay momentos que te tocan especialmente, que también conectan contigo. Este es uno de esos casos, y quiero rescatarlo y compartirlo. Basado en un texto de Charles Bukowski, me emocionó especialmente este video que forma parte del archivo profundo de Gus Huerta. ¿Es o no es inspirador desde lo más profundo?
De primero…
Un archivo colectivo de experiencias bien nutrido nos permite identificar agrupaciones clave que son la base para crear nuestra estructura de valores, para definirnos de manera única y dar coherencia a nuestra identidad.
En FoodOp se identificaron 6 agrupaciones principales que sirvieron como punto de partida para iterar las diferentes ideas hasta dotarlas de fuerza y sentido de pertenencia.
Siempre cuesta entrar en un proceso mental de ideación, de creación de contenidos, de repensar las cosas, de romper tus paradigmas… pero para mi es el momento más divertido. Disfruto encontrando la manera de sacar lo mejor de cada participante.
¿Cómo saber si has logrado captar la esencia de un valor y dotarlo de nombre y apellidos? Yo no tengo duda, cuando conecta contigo y es capaz de remover tus emociones. En el equipo FoodOp ese momento se manifestaba con una expresión clave: ¡Pum! Pa-pa
Estos son los 6 valores FoodOp:
1. En-chef-preneurs
La mezcla perfecta de emprendedores apasionados por el mundo de la gastronomía
2. Actitud degustativa
Con ganas de probar cosas nuevas, innovar en lo que hacemos y motivar a nuestro entorno.
3. Sazonando futuros
Desarrollamos el potencial de las empresas para hacerlas crecer y crear experiencias enriquecedoras.
4. Rompiendo moldes
Re-pensamos los procesos y rompemos los paradigmas del modelo industrial tradicional.
5. Pasión a fuego lento
Preparamos los proyectos con pasión y estrategia para disfrutar de un resultado exitoso.
6. Montando el banquete
Disfrutamos trabajando en proyectos gastronómicos y ponemos la mesa con todo lo necesario para el éxito.
Apetitoso, ¿verdad?. No siempre tienes un hilo conductor tan claro, para construir valores con tanto sentido. Explorar conceptos gastronómicos ayudó a despertar la creatividad e inspirar a todo el equipo.
De segundo
Sabiendo ‘desde donde’ estamos construyendo nuestro proyecto, con unos valores consensuados que nos dan solidez como equipo, lo siguiente es preguntarse el ‘para qué’ y ‘hacia donde’ desarrollamos nuestra idea, que corresponden con la misión y la visión Utópica de la organización.
Es común desviarse hacia la ‘propuesta de valor’ pero no es el momento de definir los productos y servicios que ofrecemos, este momento es para encontrar ese denominador común a todos ellos, y para encontrarlo, nada mejor que volver un paso atrás y detectar esos elementos que han tenido una presencia contínua en el archivo profundo del colectivo.
Conectando puntos y a través de una reflexión, el equipo llegó al siguiente resultado como expresión de su identidad:
Nuestra misión
Convertir la pasión por la gastronomía en experiencias únicas, compartiendo inspiración, talento y conocimiento con personas hambrientas de sueños
La visión utópica de FoodOp
Ser agentes de cambio en la industria gastronómica para generar el compromiso de alimentar sonrisas y corazones
Me gustaría saber cuantas personas son capaces de explicar su misión, visión y valores… Este equipo ha sido capaz de memorizarlas y hacerlas suyas para transmitirlas con pasión, ¡en solo 2 días!. Son los mejores embajadores para transmitirla a potenciales clientes, inversionistas, medios de comunicación, consumidores… ¡Pum! Pa-Pa
De postre
Es fundamental en todo modelado de negocio, alinear al equipo para definir lo que será la visión operativa del proyecto. Tener identificadas la misión y la visión de nuestra organización, permite una toma de decisiones ágil y coherente de cara a futuro. Saber quienes somos y hacia donde vamos, es la mejor manera de tomar decisiones con sentido.
En la última jornada con el equipo FoodOp, trabajamos con la herramienta Business Model Canvas para definir la visión operativa del año 2017.
Después de sesiones de tanta abstracción, era hora de poner los pies en la tierra e identificar nuestros públicos y alianzas, así como los productos, procesos y aprendizajes que requerimos para operar y cumplir con los objetivos anuales.
Y para finalizar, un café de reflexión
Es un verdadero gusto sentir que tu trabajo ‘enriquece’ a las personas y proyectos con los que colaboras. Tengo que agradecer a todo el equipo su pasión; no solamente han confiado en mi (gracias Gus, Alex y Juan Pablo) también gracias a cada participante que han respondido de maravilla a esa presión que he ejercido para que las cosas fluyeran con buen sabor, no hay duda de que el resultado es de 5 tenedores. ¡Enhorabuena!
Ahora tienen por delante una importante misión: es el momento de interiorizar y hacer conscientes esos cambios, de reflejarlos en la planificación de este año. Como en un restaurante, también será necesario que “les coman con los ojos” y ahí tiene una gran oportunidad FoodOp de hacer atractiva su propuesta de valor asentada en sus valores, misión y visión utópica.
A través de una identidad de marca con sabor y una estrategia maestra que combine sus mejores ingredientes, sin duda serán capaces de potenciar toda su capacidad operativa para el deleite de los paladares de México y el mundo.