Radiografía del sector editorial en España en 2017
El mercado editorial en España tiene un valor mínimo de 2.300 millones de euros. Aumentan las ventas de eBooks y de libros de bolsillo.
En esta segunda entrega de nuestra colaboración con The New Publishing Standard, su editor jefe Mark Williams, nos trae las cifras del avance del Análisis del mercado editorial en España 2017, realizado por la FGEE, y presta especial atención al desarrollo de la edición digital. Puedes consultar el artículo original en inglés aquí.
Debido a la caída en la venta de libros de texto en España, se ha producido una desaceleración en el crecimiento del mercado editorial principal en español, cuya facturación alcanzó los 2.318 millones de euros en 2017. Me refiero al mercado editorial “principal” para destacar que hay partes del sector del libro en España (por ejemplo, las ventas de autores independientes, de editoriales del sector público o de pequeñas editoriales) que no aparecen en las cifras, ya que estas proceden exclusivamente de entidades afiliadas a la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE). Por lo tanto, es razonable pensar que el valor real supera esta cifra, aunque es imposible determinar en cuánto.
Según el último informe presentado por la FGEE, las ventas de libro de bolsillo están repuntando después de seis años de declive, además las exportaciones editoriales de España crecieron un 3,8% y alcanzaron una facturación de 386 millones de euros.
El informe afirma que todos los sectores, excepto los libros de texto, los diccionarios y las enciclopedias, muestran crecimiento. Tanto los diccionarios como las enciclopedias son víctimas naturales de internet, mientras que la caída en las ventas de libros de texto en comparación con el año anterior puede atribuirse en parte al ciclo de reabastecimiento de escuelas y universidades.
Las ventas de ficción aumentaron un punto porcentual, lo que representa el 19,5% de las ventas totales. Los libros infantiles y juveniles registraron un crecimiento del 3,2% y el subsector está valorado en 286 millones de euros.
El informe destaca la concentración de las ventas en dos ciudades, Madrid y Barcelona (que representan el 93,1% del total, con Barcelona por delante de Madrid), en las que las pequeñas editoriales afiliadas a la FGEE superan a las editoriales más grandes en términos de crecimiento porcentual: obtienen el 13,6% del mercado (frente al 12,5% en 2016), mientras que las grandes editoriales caen del 39,3% en 2016 al 38% el año pasado.
Los nuevos títulos y las reimpresiones de los editores afiliados a la FGEE aumentaron un 7,1% con 87.262 nuevas incorporaciones, mientras que el número total de libros publicados en España aumentó un 7,2%, hasta los 240,2 millones. La tirada media por título se mantuvo estable en 2.753 ejemplares.
Del total de ejemplares publicados (240,2 millones), el año pasado se vendieron 157,9 millones, un 0,4% más que en 2016, lo que implica unas devoluciones de alrededor del 35%.
No está claro cuántas de estas devoluciones afectan a la rentabilidad de los editores, ya que muchos libros devueltos supondrán ventas remanentes que generarán ingresos simbólicos antes de ser revendidos, pero resulta evidente que este es un campo en el que un impulso digital podría mejorar los ingresos de los editores. Sin embargo, en el momento actual de la evolución editorial en España, la tecnología digital sigue suponiendo una pequeña parte de la industria.
Los ingresos digitales crecieron un 1,6% en 2017, lo que supone un 5,1% del mercado total con un valor de 119,1 millones de euros; se vendieron 2,83 millones de eBooks (las ventas unitarias subieron un 4%), aunque hay que volver a destacar que, especialmente en el sector de los libros electrónicos, hay muchas más ventas provenientes de editores y de autores independientes que no computan en estas cifras.
En España, los títulos de humanidades y ciencias sociales lideran las ventas de libros electrónicos (43,4%); les siguen los libros de texto con un 22,4% y los libros de ficción con solo un 19,9%. Aunque su presencia sigue siendo escasa, la poesía está funcionando bien en soporte digital.
Entre los minoristas de eBooks, que representan el 47,8% de las ventas digitales, Amazon es el líder con un 22,7%. A diferencia de los mercados anglófonos, los editores españoles cuentan con sólidas plataformas digitales propias; las plataformas propiedad de los editores representan el 28,1% de las ventas y las ventas directas en sus sitios web ascienden a un 15,3%. De nuevo, el hecho de que no se incluyan aquí los títulos autopublicados y los de editoriales pequeñas implica que las cifras de Amazon pueden ser significativamente mayores que las que se muestran aquí.
En comparación, los ingresos de las librerías y las cadenas representaron el 52,8% de los ingresos totales, lo que representa 1.200 millones de euros. Los ingresos en grandes superficies crecieron un 0,3%, mientras que los minoristas de libros en papel por internet aumentaron un 3,5%, lo que supone un total de 23 millones de euros.
Las ventas de libros de bolsillo, con una subida del 1,2%, frenaron una caída que duraba ya seis años y recaudaron 91,88 millones de euros, con un ascenso de las ventas unitarias del 3,8% (un total de 11,94 millones).
Todos estos datos se refieren a las ventas dentro de España, pero las editoriales españolas también están disfrutando de un importante crecimiento internacional: un total de 396,26 millones de euros en 2017, lo que supone un aumento del 6,9% con respecto a 2016. Estas cifras no incluyen las ventas digitales en el extranjero ni la venta de derechos.
Los principales escenarios de exportación son, como cabría esperar, Europa y América. Las exportaciones a Europa cayeron un 4,73% hasta los 173,09 millones de euros, mientras que las exportaciones al continente americano alcanzaron los 206,81 millones de euros. Las exportaciones desde España en los cuatro principales países receptores aumentaron. Francia lidera la lista y duplica con creces las cifras del segundo país, México; el Reino Unido y Argentina ocupan el tercer y el cuarto lugar, respectivamente. De estos cuatro países, tres cuentan con tiendas Kindle (Argentina es la excepción), por lo que el valor real, incluidas las ventas digitales no registradas, será probablemente mayor.
Todas estas cifras deben leerse en un contexto de estabilización tras un acusado desplome del mercado del 25%. Y no, no tuvo casi nada que ver con Amazon o con los libros electrónicos.
Aquí puedes consultar un resumen más detallado y acceder a la versión íntegra del avance.
