2017, lo bueno, lo malo, lo feo, y lo que viene en 2018 para Uncommon.
Ahora con frecuencia me encuentro respondiendo la misma pregunta sobre cómo empezó Uncommon y la respuesta siempre empieza por el mismo camino, por casualidad.
Hace casi 5 años decidí dejar el mundo corporativo y, sin hacer el cuento muy largo, pasé por una startup fallida de envío de cerveza artesanal a domicilio, a consultor independiente para una agencia extranjera, atropellados intentos de sociedades con algunas personas hasta llegar a Uncommon y dos increíbles inversiones: Mezcal Viejo Indecente y Caldos Ánimo, ambos con socios increíbles.
Este 2017 ha sido un año de madrazos, golpes de los buenos, todos vinculados a las fricciones del crecimiento. Ha sido un año en el que he vivido en una especie de limbo. Estuve 4 meses fuera de mi casa, viajando como loco para empujar el negocio en Madrid y Buenos Aires, visitando y conociendo nuevas ciudades, congresos de temas diversos y, sobre todo, aprendiendo un montón.
Estar en esta especie de limbo me llevó a ceder parte de la responsabilidad de la agencia a otras personas, y como todo proceso de cambio, tuvo sus altas y bajas. Mucha gente me decía “no puedes esperar que otros tengan la misma pasión por el negocio que tú.”, y tengo evidencia de que sí. No siempre se tomarán las mismas decisiones que tú tomarías pero con los incentivos correctos las personas van a apropiarse de la responsabilidad y el beneficio. El paso de ceder la dirección es un ejercicio de confianza, de acompañamiento, de comunicación y de incentivos. Al mismo tiempo, todos en Uncommon estamos aprendiendo a ser managers, dedicarse al Diseño Estratégico no es todo bailes y risas, nos hemos tenido que auto-exigir el crear mejores mecanismos de ‘management’, ser rigurosos en la ejecución, darnos constante feedback y diseñar las herramientas para que esto se logre de manera correcta. Hemos estado siguiendo el principio de ‘radical candor’, en donde tenemos que decirnos las cosas como son, sin rodeos, pero con cariño, el cariño de querernos ayudar a todos ser mejores, por el equipo, por nuestros clientes y por el negocio.
Lo bueno: elegí y me eligieron las personas correctas.
Lo malo: adaptarse a este proceso es doloroso para ambas partes y a muchos nos cuesta trabajo darnos cuenta de cuándo y cómo nos equivocamos.
Lo feo: el sentimiento de pérdida de control y, en algunos casos, la falta de apertura al cambio y al feedback.
El 2018 será un año particularmente retador, tres oficinas, equipo de 25 personas, y por tanto ceder y confiar en más personas, acompañarlas y darles las herramientas adecuadas para administrar equipos y oficinas, pero sobre todo de mantenernos siempre comunicados, honestos y transparentes.
“If you build it, they will come.”
Uncommon sigue creciendo de forma acelerada, cada año con crecimientos de casi el 100%. Con esto hemos aprendido que el crecimiento duele, duele más que nada en dos temas, tesorería, pero principalmente talento.
Encontrar personas que vean en Uncommon una plataforma para alcanzar sus metas personales y profesionales no es cosa fácil. Tampoco es cosa fácil que las personas se adapten a la manera en la que trabajamos y nos comunicamos. Buscamos siempre personas que persigan y se comprometan con nuestro propósito. Formar al equipo es uno de nuestros principales retos, en nuestro negocio el pensamiento crítico y estratégico son factores clave, no los métodos y el proceso.
El comportamiento individual y colectivo son también relevantes, un equipo pequeño es como una familia y alinear a las personas de diversos ‘backgrounds’ tiene su punto fino.
Este año me he equivocado en un par de cosas; en asumir que todos entendemos responsabilidad y convivencia de la misma manera y, la más importante, el creer que los miembros del equipo son de la empresa. En algún momento llegué a escribir que algunas empresas nos “robaban” personal, pero hoy entiendo perfectamente que el talento no es de nadie y que como responsable de la agencia tengo que construir las condiciones ideales para el talento, para impulsarlos a conseguir lo que aspiran más allá del ingreso económico (en donde nos hemos fijado retribuir siempre más que el mercado).
Lo bueno: las personas que hoy conforman Uncommon son perfectas, y las seguiremos impulsando económicamente, pero sobretodo profesional y personalmente.
Lo malo: no hemos encontrado aún el modelo ideal de captación, gestión y desarrollo de personas.
Lo feo: mis errores de gestión provocaron la salida del equipo de personas muy talentosas.
En 2018 seguiremos creciendo y seguiremos incorporando talento, formándolo y midiéndolo. Tenemos una sorpresa preparada para ello. Además, el equipo de Uncommon México diseñó el reglamento de trabajo y convivencia, asegurando así compromiso y responsabilidad en su implementación y cumplimiento.
“Equip people with the intelectual tools they can use to adapt to a changing world and achieve their goals.”
En los últimos 5 años en México y Latinoamérica el Diseño Estratégico se ha convertido en algo ‘mainstream’. La mayor parte de este ‘hype’ viene de la mano de la popularización del ‘Design Thinking’, ahora hay ‘design thinkers’ en todos lados.
La cara positiva de esta popularización es el incremento de la relevancia y la consideración del Diseño para todo tipo de negocios, tema que a los diseñadores más tradicionales no les emociona tanto. Desde mi punto de vista hay una gran oportunidad aún no capitalizada para que el Diseño sea una capacidad fundamental de todas las organizaciones.
La cara negativa de todo esto es que hay un abismo de entendimiento y profesionalización de muchos practicantes de ‘Design Thinking’. En los últimos 3 años hemos visto una explosión de programas académicos, de facilitadores de fiestas de post-its que únicamente entienden ‘Design Thinking’ como un conjunto de métodos que se ejecutan siguiendo un proceso. En paralelo ha surgido un movimiento intenso de ‘hate speech’ para el ‘Design Thinking’ (acá uno especialmente incendiario). Sin afán de entrar en una discusión académica, considero relevante y urgente cerrar el ‘gap’ de conocimiento sobre Diseño en el mundo de los negocios, sobre todo para dar el peso justo y que se genere el impacto esperado. Entender Diseño como una disciplina para abordar problemas, los grandes problemas del mundo, nos obliga a pensar crítica y estratégicamente sobre Diseño, empezando por el ‘mindset’, principios y bases académicas, conociendo también sus limitantes, todo esto antes que los métodos y el proceso. Recomiendo que se lean esta nota: “El Diseño y yo” de Jorge Camacho para profundizar en las capacidades y evolución del diseño.
Lo anterior es la razón por la cual editamos un ‘toolkit’ (descárguenlo), porque pensamos que los métodos y el proceso deben ser utilizados por todos, siempre teniendo en cuenta lo importante que es el desarrollar en paralelo capacidades de liderazgo, management y pensamiento crítico y estratégico en la identificación y planteamiento de retos, para en consecuencia construir, desarrollar, implementar soluciones, y así medir su impacto.
‘Design Thinking’ parece ser solo el principio de estas olas de popularización de disciplinas empaquetadas en procesos y métodos. Lo mismo empieza a suceder con el Diseño de Futuros, Service Design, y se sumarán a la lista Circular, System y Transition Design.
Quiero aclarar que no soy totalmente ‘hater’ de que lo anterior suceda, pero me preocupa que no haya las bases ni experiencia suficiente como para promover estas disciplinas como el ‘next big thing’ o como la cura de todos los males de las organizaciones. Cualquier reto de transformación de un negocio tiene que primero ser abordado desde el liderazgo y la cultura, que son la infraestructura básica para cualquier cambio.
Lo bueno: sabemos que hay mucho recorrido delante para el Diseño Estratégico en las Organizaciones.
Lo malo: aún hay un entendimiento limitado sobre el potencial del Diseño en organizaciones, agencias y profesionales que lo practicamos en México y Latinoamérica; nos hemos acomodado en la conceptualización de productos y servicios, no mucho más.
Lo feo: la popularización del Diseño está provocando el surgimiento de pseudo-profesionales y coaches charlatanes, siento por la dureza de mis palabras pero así lo creo.
El 2018 será aún más relevantes para la valorización del Diseño. Lo vemos en España en donde el Diseño comanda ahora el desarrollo de nuevas empresas, el aprovechamiento de las tecnologías y las estrategias empresariales. Lo vemos en México en donde los proyectos que surgen son cada vez más transformacionales. Y lo vemos en Argentina con el creciente interés de las organizaciones, públicas y privadas, en ver al Diseño más allá de la creatividad en comunicación.
En Uncommon seguiremos siendo agnósticos a la idea de un solo proceso y grupo de métodos para resolverlo todo, pero seguiremos firmes hacia impulsar Diseño como uno de los principales caminos para el mejoramiento de nuestro entorno, tanto a nivel comercial como social. Hemos recientemente re-escrito nuestro propósito: “Crear una versión más chida del mundo a través del Diseño.” y la adaptaremos a cada mercado creando una versión más sarpada, guay, bacán… del mundo.
Crear una versión más chida del mundo a través del Diseño.
Perseguiremos nuestro propósito a través de un equipo que demuestre el valor del Diseño a las organizaciones. Exploraremos más y mejores aplicaciones del Diseño a problemas y retos más amplios, más sistémicos y más transicionales.
“Evidence used creatively to generate hypothesis, test hypothesis, draw conclusions, recognize biases, and develop novel solutions…”
Hacer, afinar y seguir haciendo será nuestro principio rector durante 2018, dejar atrás la parálisis por análisis.
“Las prácticas dieron lugar a las ciencias.”
Tenemos un conjunto de creencias, metas y objetivos, y trabajaremos en virtud de ellos. Los últimos años he escuchado los planes, ideas e intenciones de muchos, pero de pocos hemos visto acción. 2018 será un año de acción.
Los invito a todos a ser diseñadores.
“In a world of rapid and profound transformation, we are all designers.”
Para cualquier comentario, queja y sugerencia pueden escribirme a bernardo@noescomun.com
Pueden conocer más sobre el trabajo de Uncommon en www.noescomun.com o en nuestros canales sociales todos bajo el user noescomun.
