Suena cada uno de los acordes de su guitarra, emanando un aroma que no pertenece a este mundo de humanos sin sentido ni razón.
Cristian el terco
Me citaste al mismo puente de siempre, pero esta vez me pediste que llevara una carta. Que fuera en un papel blanco y con el bolígrafo que me habías regalado. Me pediste que la reescribiera, que tuviera el mismo poema de siempre. Y que no olvidara el ramo de…
los momentos y doloresno se acotan, ni se cansan.
Ayer me rompí la cabeza,en mis jugarretas de niño,lloraba con la voz limpiay hoy por la mañanaamanezco tosiendo,hablando por debajode plomos algodones.