El camino hacia Cali

Juntas construimos la ruta feminista para llegar al Tercer Encuentro Latinoamericano de Mujeres.

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Por tierra y por aire, más de 800 mujeres se movilizaron hacia Cali para participar del Tercer Encuentro Latinoamericano de Mujeres. Autogestionadas, con apoyos locales o con la solidaridad de redes compañeras: fueron muchas las formas en que las participantes buscaron la forma de ser parte de ELLA 2017. Así, tramo a tramo, fuimos construyendo esta ruta feminista.

Gracias a la convocatoria, pudimos ayudar a movilizarse hasta Cali a 15 mujeres de 15 países distintos por avión y a 10 mujeres de otras ciudades de Colombia por tierra.

El encuentro logró borrar fronteras y conectar a caravanas de distintos puntos de Colombia, Venezuela y Ecuador.

El mapa colombiano logró trazar una red con buses de Bogotá, Ibagué, Armenia y Medellín.

La caravana chavista se movilizó a pura máquina y 80 compañeras se sumaron a la travesía. Para muchas de ellas, este fue su primer viaje al exterior. Y las 37 ecuatorianas que se sumaron al encuentro no dudaron en hacer frente a las 30 horas de viaje para lograr su misión.

“Esta es una oportunidad de poder compartir nuestras experiencias en territorio. De poder unirnos con cientos de hermanas de la región, intercambiar estrategias, reconocernos y volver a nuestros países mucho más fuertes”, compartía Malu, de Ecuador, en una de sus presentaciones en el encuentro.

Por último, a través de la convocatoria se incentivó a las mujeres para que se autogestionen sus viajes hasta Cali ynos envíen sus datos de salida y llegada para que nosotras coordinemos los tramos.

Paso a paso

Después de la atención inicial vía email, se hicieron manuales de autogestión para las caravanas, se elaboró un manual de supervivencia para quienes se iban a alojar en el campamento, se confeccionó una lista de datos útiles sobre Colombia que incluían desde ferias de comidas y puntos turísticos, hasta consejos sobre como resistir al calor caleño.

También por correo electrónico, recibimos los pasajes de las participantes para poder organizar los traslados hasta el lugar del encuentro.

Por un chat específico, el equipo de logística daba la atención necesaria para sistematizar los datos y acompañar durante los días del encuentro las llegadas y salidas del aeropuerto. Del mismo modo, acompañaron también a las mujeres que no se hospedaron en el campamento, para facilitar los tramos desde los hoteles hasta la ciudad ELLA. En total fueron mas de 70 traslados entre aeropuerto y ciudad ELLA.

Contamos con un servicio de traslado, pero también hicimos una convocatoria para que conductores voluntarios colaboren con traslados del equipo, viajes de emergencia o de personas que llegarían en horarios diferentes o muy alejados del resto. Coordinamos esto desde un chat con 9 coches colaborativos.

Creamos un protocolo de como facilitar la logística para que todas siempre tuvieran acceso a las informaciones de quien estaba llegando, saliendo o desplazándose durante el encuentro.

Y finalmente sumamos un mapa completo para no perderse en la #CiudadElla. Durante los días del encuentro, las mujeres tomaron por completo las instalaciones de la Universidad del Valle donde se realizaron todas las actividades y convirtieron el campus en una verdadera aldea feminista.

Hospedaje

Otra parte de la logística preveía acompañar y ayudar a las invitadas con su hospedaje y mujeres autogestionadas que no dormían en el campamento.
Hicimos negociaciones con hosteles para conseguir descuentos y después.

En total, alojamos fuera del campamento 70 mujeres.

También acompañamos a las mujeres que se hospedaron durante más días de lo que duró el encuentro. De este modo ayudamos a 20 mujeres a que se hospeden en Colombia una vez finalizado el encuentro.

Desde la seguridad hasta el seguimiento de las caravanas. Desde la movilización en chats de trabajo, hasta la sistematización de 70 traslados. Desde los manuales de viaje hasta la atención de la Cruz Roja; la logística de ELLA fue pensada en clave colectiva y feminista.

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