Ofreciendo disculpas (II)
“Las disculpas no están destinadas a cambiar el pasado, están destinadas a cambiar el futuro”.
— Kevin Hancock autor estadounidense.
Hace un año escribí sobre las barreras más comunes que impiden ofrecer disculpas pero también sobre una serie de acciones y estrategias para generar una disculpa reflexiva. Todas tomando en cuenta diversos estudios científicos para generar validez. Fue muy interesante pero quizás faltó un punto adicional.
Este año estuve expuesto a diversas situaciones donde tenía que pedir disculpas. Incluso, me comentaron que la disculpa es lo más importante si la otra persona te lo pide. Sin embargo, ¿siempre funciona?, ¿cuándo no?
Siento que faltó analizar una parte muy importante: la perspectiva de la persona que recibe las disculpas.
Justo esta semana estuve recomendando — gracias a Andrea — el test del love language. El cual es muy importante para conectarse mucho más con las demás personas, al comunicar lo que realmente nos importa.
Indagando, encontré otro test — del mismo autor — pero esta vez para conocer cuál es tu lenguaje de las disculpas.
Si bien, todos los test tienen diferentes sesgos, pienso que es un buen punto de partida para iniciar una conversación y generar una reflexión en cuanto a un tema que quizás no conversemos mucho. Tal cual me lo comentó Shirley hace poco.
Entonces, ¿lo intentamos? En mi caso, este fue mi resultado:
35 % Expresar un propósito de cambio.
31% Restituir el daño ocasionado.
15% Expresar arrepentimiento.
12% Pedir Perdón.
8% Asumir responsabilidad.
Exploremos las definiciones realizadas por el Dr. Gary Chapman:
Expresar un propósito de cambio
Algunas personas dudarán de la sinceridad de una disculpa si no va acompañada del deseo de su pareja de modificar su comportamiento para evitar la situación en el futuro.
Un aspecto importante es verbalizar el deseo de cambiar. Tu pareja no puede leer tu mente. Aunque puedes estar tratando de cambiar por dentro, si no verbalizas tu deseo de cambiar, lo más probable es que tu pareja todavía se sienta lastimada. Por este motivo, es importante crear un plan dedicado para realizar el cambio. Dar pequeños pasos, en lugar de uno grande, incrementarán las chances de realmente cambiar.
Restituir el daño ocasionado
Para las personas con este tipo de lenguaje, es importante que su pareja justifique o explique sus acciones. Ya que creen que los actos incorrectos exigen justicia. El que comete el delito deberá pagar por su mal accionar.
Es importante, y valdrá la pena preguntarse: “¿qué puedo hacer para arreglar esto?”. Para ello, es importante conocer el lenguaje de amor de la pareja. Por ejemplo, no bastarán unos chocolates, si es que lo más importante, para tu pareja, es el tiempo de calidad o las palabras de afirmación y no los regalos.
Expresar arrepentimiento
Es una admisión de culpa y vergüenza por causar dolor a otra persona. Un simple “lo siento” es todo lo que buscan las personas con este lenguaje. No es necesaria una explicación o pagar por el error, siempre que la disculpa realmente venga del corazón.
Expresar arrepentimiento va directo al grano. No pone excusas ni intenta desviar la culpa. Es un compromiso sincero de reparar y reconstruir la relación.
Pedir perdón
En algunas relaciones, una persona quiere escuchar a su pareja pedir perdón. Quieren seguridad de que su pareja reconozca la necesidad de perdonar.
Pedir perdón demuestra que uno se da cuenta de que ha hecho algo mal y que está dispuesto a poner el futuro de la relación en manos de la persona ofendida. No es fácil ya que, a menudo, uno puede sentirse vulnerable al rechazo. La única manera de superar este miedo, es reconocer que es muy común.
Asumir responsabilidad
Por los fracasos. Para muchas personas, todo lo que quieren es escuchar es un “estoy equivocado”. Si la disculpa no viene acompañada de una responsabilidad por sus acciones, muchas personas no sentirán que la disculpa fue significativa y sincera.
Para realizarlo, es necesario aprender a superar el ego, el deseo de no ser visto como un fracaso y simplemente admitir que las acciones fueron incorrectas. Ser sincero en la disculpa, es permitirse ser débil y admitir que cometemos errores.
En mi caso, el puntaje expresa gratamente lo que yo no he podido transmitir. Por años, he fallado al comunicar cómo me gustaría recibir unas disculpas. Si bien expresé algunas aproximaciones, realmente no fueron tan detalladas. En mi caso, un “disculpa, no lo volveré a hacer”, no sirve. Pero un “lamento haberte hecho dañado pero realizaremos estas acciones específicas para estar mejor. ¿Me ayudas a generar otras ideas?”, es lo que siempre he esperado escuchar.
¿Cómo es tu caso?, ¿cómo te gustaría recibir disculpas? Un proceso de reflexión nos podrá ayudar a dar un paso más para poder relacionarnos en armonía con los demás.
“Una disculpa puede ser algo maravilloso siempre que sea poco frecuente y desde el corazón. Sin embargo, cuidado con la persona que justifica el mal comportamiento con disculpas. Para ellos es un medio para un fin y, muy a menudo, a costa de otros”.
― Gary Hopkins, escritor estadounidense.
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¡Que tengas un buen día!
