500 Años y el Catastro en Veracruz Moderno

Veracruz digital
Veracruz, te quiero digital
6 min readNov 10, 2021

Desde la fundación de Veracruz, en 1519, el catastro se convirtió en una figura relevante. Es una de las dependencias administrativas más antiguas de América, con más de 500 años de historia, y es la base para la división territorial, así como para la recaudación de la contribución de los municipios más importantes en México.

Actualmente existen en el municipio 270,895 predios y el crecimiento urbano continúa avanzando debido a terrenos susceptibles de urbanización y por la ampliación del puerto marítimo, que se ha convertido en el más importante del país.

A pesar de su larga historia, el catastro en 2018 presentó un nivel de obsolescencia tecnológica que dificultaba la operatividad administrativa: las transacciones se basaban en un sistema IBM AS-400 de 1994, sin capacidad de actualización; la información fotográfica era de 1999, no acorde con los 20 años de crecimiento urbano del municipio; la cartografía estaba desvinculada del padrón catastral, haciendo difícil su uso; las tablas de valores estaban dispersas y desvinculadas, lo que provocaba lentitud en la consulta de información; los trámites y servicios eran presenciales y con períodos largos de espera; no existía un sistema integrado de gestión catastral, por lo que la comunicación entre dependencias era manual y escalada entre funcionarios públicos; y había un alto número de personal resistente al uso de tecnologías por temor de no contar con habilidades para el desempeño.

Ante este panorama, se implementó un proceso de modernización bajo tres ejes estratégicos: estandarización, uso de nueva tecnología e integración con sistemas para ofertar trámites y servicios con herramientas digitales. Esto contribuyó a digitalizar la atención, dotándola de eficacia jurídica con apoyo de los notarios públicos de la ciudad; asimismo, se actualizó la cartografía, ofreciendo a las personas información sobre sus predios para tomar mejores decisiones en el desarrollo urbano y económico del municipio. Se mejoró la recaudación de impuesto predial, evitando la corrupción que se puede presentar con trámites físicos y recuperando la confianza en la relación ciudadanía y gobierno.

La modernización del catastro inició con un diagnóstico local a fondo a partir del cual se tomaron decisiones sobre la información requerida. Fue necesario un cambio de perspectiva que fluyera de la mano con la transformación tecnológica. Actualizamos el almacenamiento de la base de datos en nuevos servidores; realizamos fotografía con vuelo de drones y recorrido de 360º; vinculamos la cartografía con el padrón que fue actualizado y las tablas de valores mediante sistemas digitales. Samantha Tostado Silva, recuerda el inicio: “Fue fluido porque se tenían identificadas las oportunidades de mejora, la comunicación y retroalimentación fueron muy importantes durante todo el proceso, se rompieron muchos paradigmas y el personal se abrió al cambio, comprendiendo que la modernización catastral simplifica sus funciones, beneficiándose al igual que los ciudadanos”.

Algunas de las mejoras más importantes incluyeron la implementación de la interacción para hacer trámites y brindar los servicios en línea; autorizamos el reglamento de gobierno electrónico que permite el uso de la firma electrónica y reconoce los derechos digitales de las personas; creamos una agenda ciudadana digital para evitar filas largas en los trámites presenciales; desarrollamos mecanismos de pagos 100% digitales y un sistema integrado que permitiera la comunicación entre las áreas de la tesorería municipal.

Además, se llevó a cabo un convenio de colaboración con el Colegio de Notarios Públicos de Veracruz para capacitarles en el sistema y lograr mayor incidencia en el uso de las herramientas digitales.

La modernización del sistema catastral impactó positivamente en la atención ciudadana. Para María Guadalupe de la Rosa Cabrera, “ahora son mucho más ágiles los trámites, se pueden consultar desde casa y ayuda al medioambiente ya que se ahorra mucho papel”. Los tiempos de espera se han reducido sin que se afecte la certeza jurídica de los documentos.

En la actualidad, el catastro municipal es uno de los más actualizados en el Estado de Veracruz. En 2020 se realizaron más de 1,500 trámites de manera mensual, y a la fecha llevamos un total de 40,169 procesos 100% digitales. Aunado a lo anterior, de acuerdo con el reporte de la tesorería virtual, en un solo año se incrementó la recaudación en un 21.30%, es decir, en 2019 la recaudación de predial fue de $86,547,813 (2019) y en el 2020 ascendió a $109,978,407.

A su vez, los ingresos por medios digitales se incrementaron en un 46.03%, pues en 2019 la recaudación alcanzó un monto de $9,894,291 y para 2020 este llegó a los $18,334,081.

Las cifras son una evidencia de los beneficios del proceso de modernización. Sin embargo, todavía quedan algunas áreas en las que se debe trabajar. Es necesario desarrollar un sistema de alerta automática de cambio en las propiedades, con base en el análisis de imágenes satelitales e imágenes de cámaras a nivel de calle. De igual manera, se debe crear un algoritmo de visión computacional para identificar, de forma autónoma, cambios en tamaño y uso de los predios, y no debe faltar un sistema de alertas de inconsistencias con las bases de datos catastrales.

Identificamos otros elementos necesarios, por ejemplo, un script para la construcción de polígonos digitales integrados a partir de la combinación de datos de imágenes satelitales e imágenes horizontales de los vehículos públicos, y actualización de la cartografía digital a partir de la integración de los polígonos con los datos pre-existentes de catastro. También, es esencial realizar un mapeo predictivo de infraestructura urbana y construcción de cartografía ampliada; se deben crear shapefiles integrados con el sistema cartográfico del municipio, así como un sistema de visualización interactivo de brechas de servicios públicos e infraestructura.

El proceso de modernización del catastro de Veracruz nos dejó varias lecciones. Aprendimos que innovar es más que implementar una tecnología nueva. Se deben replantear los procesos de atención a la ciudadanía. Simplificar e innovar con apoyo de los servidores públicos es clave para el desarrollo de nuevos modelos de servicio.

No debemos olvidar que el municipio es un área de oportunidad, donde el respaldo financiero es clave. La inversión en el catastro municipal permite la recuperación rápida de los costos erogados, por lo que es importante no dudar en invertir en su modernización.

Asimismo, es esencial tener en cuenta a la ciudadanía. Se deben incorporar sistemas eficientes y fáciles de usar, que funcionen de manera conjunta con el modelo de gobierno abierto. Es fundamental conocer el estatus y actualizar los diagnósticos situacionales, trabajando con más datos, de modo que estos sean indicadores para mejorar la gestión de los proyectos y nutran, en beneficio de las personas, los procesos de desarrollo social y económico.

¿Qué aprendimos?

  • Actualizar los datos y que sean interoperables contribuye a mejorar la calidad de la atención ciudadana;
  • Diagnosticar, identificar y no tolerar los problemas que se interponen en el camino de estos objetivos permiten atender los retos estructurales que se enraizan con el tiempo;
  • Aliarte con quienes realizan los procesos catastrales de forma cotidiana, como las y los notarios públicos.

Si quieres conocer más, visita la Tesorería Virtual.

Además de la modernización del catastro, la transformación del Ayuntamiento de Veracruz incluyó la creación de un nuevo Sistema de Información Geográfica para mejorar la toma de decisiones en el desarrollo urbano. Si quieres leer más sobre esto puedes ir aquí:

O bien:

--

--