No tengo tiempo

Jonathan Martell
Jonathan Martell
Published in
5 min readSep 1, 2021
Surco - marzo, 2020.

El tiempo es información que no tenemos. El tiempo es nuestra ignorancia”. Carlo Rovelli, físico teórico italiano.

— “No tengo tiempo, ya no sé qué hacer”.

— “No la hago, no tengo tiempo”.

— “¡Imposible! Con los tiempos que manejo, se me hace difícil encontrarme un espacio”.

— “¡Ayúdame! No tengo tiempo”.

¿Estas frases nos resultan familiares? Seguramente sí. Las hemos escuchado o quizás las hemos repetido en distintas situaciones. En algunos casos, de manera consciente y en otros de manera inconsciente, solo dejándonos llevar por la costumbre o la reacción del momento.

¿Realmente no tenemos tiempo o qué sucede? Probablemente en varias oportunidades hemos utilizado estas frases como excusa perfecta para salir de ese plan al cual no queríamos ir. Quizás cuando ese chico o chica nos invitaba a hacer algo que no nos provocaba y sutilmente respondimos con un: “no tengo tiempo”. El tiempo siempre será la coartada perfecta para encubrir nuestras verdaderas intenciones: no realizar la actividad.

Claro, siempre es mejor ser sincero y dar la respuesta más honesta que podamos. Incluso, aquel encuentro nos podría traer más sorpresas inesperadas o cambios de perspectiva. Pero ese ya es otro tema.

Por ahora, podemos centrarnos en si realmente contamos o no con ese tiempo. Analicemos si realmente lo es.

¿Qué actividades realizas durante el día? (excluyamos la actividad de dormir). Podemos crear una lista para visualizarlo fácilmente, donde cada actividad indique el número de horas que le dedicas al día. Finalmente, podríamos colocar el % de dedicación sobre el total de horas. Debería quedar algo como esto:

  • 15% Comer (desayuno/cena/almuerzo) — 2 horas y media.
  • 52% Trabajar — 9 horas.
  • 6% Ejercicios — 1 hora.
  • 12% Redes sociales — 2 hora.
  • 9% Netflix/Youtube — 1 y media hora.
  • 3% Asearse — 1 hora.
  • 3% Otras actividades — 1 hora.

En este caso, considerando siete horas de sueño. ¿Llama algo tu atención de tu propio ejercicio o de este? Siempre que suelen decirme que no hay tiempo para hacer alguna actividad que buscamos realizar, mi respuesta es tajante: siempre hay tiempo. Simplemente pasa por un tema de priorización. ¿Por qué? Porque siempre podemos sacar alguna actividad de nuestro día y reemplazarla por otra. Incluso, acortarla.

¿Buscas realizar más ejercicios físicos? Pues prioriza esa actividad en vez de otra. Por ejemplo, antes que ver Netlfix. O puedes hacer como yo, y hacer las dos cosas al mismo tiempo: entrenar mientras ves tu serie favorita. Matas dos pájaros de un solo tiro y generas un hábito positivo: es fácil, provoca realizarlo y genera la sensación de volver a repetirlo.

¿Buscas aprender un nuevo idioma o tema? Probablemente esta respuesta no le gustará a la mayoría de personas que trabajan en recursos humanos pero mi consejo es usualmente: ¡quítale tiempo al trabajo! Pienso que la vida no se trata de trabajar todo el día. Le estamos dedicando ya el 50% de nuestro tiempo, si no es mucho más. Como leí alguna vez por ahí: “¿acaso tu trabajo estará contigo cuando estés en la clínica pasando tus últimos días de vida?”. Entiendo situaciones donde el contexto nos obliga a trabajar más de lo debido por tener responsabilidades con otras personas. Sin embargo, aún en este escenario, pienso que es finalmente nuestra elección, ya sea por nuestro estilo de vida, horas dedicadas y ambición que persigamos.

Cada persona tiene una perspectiva diferente sobre la vida, y la respeto si finalmente le hace bien a su salud física y mental. Pero si no es así, pues deberíamos cuestionar cómo estamos tomando nuestras decisiones y priorizaciones. Quizás hayamos dejado pasar algún problema del pasado y ahora nos afecta incoscientemente. Es importante siempre conversar con uno mismo, aclarar nuestras ideas y luego compartirla con las personas que nos rodean para obtener un punto de vista diferente. ¿Está alineado con nuestra identidad o con la que buscamos? ¿Qué hacer luego?

Un paso más álla

Si queremos ir uno o dos niveles más profundos de análisis, incluso podríamos cuestionarnos ¿qué es realmente el tiempo? El fisico italiano Carlo Rovelli, en su libro ‘The Order of Time’ menciona que el tiempo es una ilusión: nuestra percepción del fluir del tiempo no corresponde con la realidad física, ya que depende enteramente de nuestra incapacidad para ver el mundo en todos sus detalles. Él sostiene que la realidad es solo una compleja red de eventos sobre los que proyectamos secuencias del pasado, presente y futuro.

Sostiene que la incertidumbre cuántica significa que no podemos conocer las posiciones y velocidades de todas las partículas del universo por lo que “si observamos el estado microscópico de las cosas, entonces la diferencia entre pasado y futuro se desvanece … en la gramática elemental de las cosas, no hay distinción entre ‘causa’ y ‘efecto’”, plantea Rovelli.

¿Otras miradas?

El Budismo también nos ofrece una visión similar al de la ciencia: la forma en que experimentamos el tiempo, como fluyendo del pasado al presente y al futuro, es una ilusión. Incluso, cuestionando la realidad del ‘yo’ ya que no somos permanentes, estamos en constante flujo, en constante movimiento.

Conclusión

No tomarnos las cosas en serio: todo pasa, todo cambia y finalmente se mantiene en equilibrio. Si buscamos una respuesta menos filosófica y más práctica, podemos quedarnos con que siempre ‘hay tiempo’, lo que no hay es una priorización adecuada de actividades del día. Esta priorización depende exclusivamente de nosotros, el qué hacer y el qué no. Incluso si tenemos un jefe, trabajo o familia que nos empujan a tomar ciertas decisiones, ha sido nuestra decisión estar ahí. Siempre dependerá de nosotros tomar nuevas decisiones para cambiar la dirección de nuestro camino.

Así que la próxima vez que te digan “no tengo tiempo”, puedes cuestionar esa respuesta y por lo menos obtener una más sincera. ¿Lo intentamos?

“Nadie puede aconsejarte y ayudarte, nadie. Hay un solo medio. Ve dentro de ti”.

- Rainer Maria Rilke, poeta y novelista austriaco.

¡Que tengas un buen día!

--

--