Caer
Mientras cocinaba, cuchillo en mano y tras una mala maniobra, mis dedos dejaron de responder. Primero fue el meñique, luego el anular, una milésima después el mayor y por último el pulgar. Se agarrotaron, o algo por el estilo, e hicieron que el cuchillo cayera y rebotara tres veces sobre la tabla, como pez recién…